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Propiedad condenada (1966)

Fecha: Jueves 02 Noviembre 2023, 21:30h.
CEZ: 159.

Lugar: Café Pepe.

Propiedad condenada (1966)

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aliasCEZ:Sr.Chow

Invitación a ver la película de Sr.Chow:

Pude descubrir esta película en una sala de cine y me dejó perplejo. Me quedé muy sorprendido al disfrutar de una película de la que no había oido hablar nunca y que tenía un director (Sydney Pollack), unos actores (Robert Redford, Natalie Wood, Charles Bronson,...) y unos guionistas (Francis Ford Coppola a partir de una obra de teatro de Tennessee Williams) muy conocidos.

La acción se sitúa en el Sur de los Estados Unidos en la época de la Gran Depresión. Prefiero no desvelar nada más antes de que la veáis. Tan sólo lo evidente: al ser una obra de teatro gran parte de la acción se concentra en un único lugar aunque hay otros recursos como el flashback y una ampliación del argumento debidos a su traslación a cine. Y al ser de Tennessee Williams tiene unas constantes al igual que en otras obras suyas también llevadas al cine: "Un tranvía llamado Deseo", "La gata sobre el tejado de zinc", "De repente, el último verano", "Dulce pájaro de juventud",... Ambientación sureña, el calor como protagonista, familias disfuncionales, alcoholismo, venganza,... el drama está muy presente.

Imagen de 'Propiedad condenada (1966)' Imagen de 'Propiedad condenada (1966)'.

Si bien la película no es perfecta hay que reconocer que tiene grandes virtudes, sobre todo en lo que respecta a la fotografía de James Wong Howe, a la ambientación de la época y a las interpretaciones. Robert Redford y Natalie Wood están que se rompen de guapos y mejoran muchísimo con su voz original.

De vez en cuando pondré una de estas películas que me dejaron sorprendido porque no me sonaban de nada y debería conocerlas: mi lista de "películas perplejas". Será divertido divagar sobre las causas y motivos: ¿son películas menores, imperfectas?, ¿no triunfaron en su momento?, ¿no se han pasado nunca por televisión?, ¿existen problemas con el acceso a los derechos de distribución por país?,...

Los viajes de Sullivan (1941)

Fecha: Jueves 10 Mayo 2018, 21:30h.
CEZ: 118.

Lugar: Café Pepe.

Los viajes de Sullivan (1941)

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aliasCEZ:Sr.Chow

Invitación a ver la película de Sr.Chow:

Ante la “voz de alarma” de nuestro Jeff al respecto de que en los últimos tiempos las propuestas eran muy (demasiado) dramáticas recordé esta película. Los viajes de Sullivan está dirigida por Preston Sturges en 1941. Sturges tuvo una carrera corta como director, tan sólo 12 películas y casi todas ellas comedias, que se consideran absolutos clásicos del género.

Hoy os propongo un giro hacia la comedia (aunque mezcla otros géneros: tragedia, cine dentro del cine,...) de varios tipos:

Imagen de 'Los viajes de Sullivan (1941)' Imagen de 'Los viajes de Sullivan (1941)'

  • Comedia romántica: una pareja se conoce y se muestra cómo avanza su relación.
  • Comedia sofisticada (o comedia elegante): son películas con diálogos ágiles, situaciones elaboradas y con ritmo cuyos protagonistas son de clase alta. Corriente iniciada por Ernst Lubitsch.
  • Comedia alocada (o comedia screwball): con conflictos entre clases sociales y que suelen acabar en boda, como final feliz, tras algún que otro divorcio. Comedia popular durante los años 1930 y primeros 1940 tras la Gran Depresión.
  • Comedia de golpe y porrazo (o comedia slapstick): se caracteriza por presentar acciones exageradas o gags de violencia física que no derivan en consecuencias reales de dolor. Herencia del cine mudo clásico.

Imagen de 'Los viajes de Sullivan (1941)' Imagen de 'Los viajes de Sullivan (1941)'

Estamos en Estados Unidos en la época de la Gran Depresión. Para su próxima película Sullivan quiere dirigir un drama de interés social que plasme el sufrimiento de sus compatriotas, con el loable propósito de aliviarlo. Pero antes necesita conocer bien cómo viven los pobres, que son la mayoría de los americanos, ya que él es un director de cine de éxito muy rico y no lo sabe. Entonces se disfraza de vagabundo y sale de viaje pero vigilado/protegido por sus colaboradores desde un vehículo... Como se diría hoy en día es un auténtico postureo, un engaño ridículo. Sus primeros viajes son infructuosos pero el director insiste en ellos... No desvelaré nada más. En el próximo encuentro hablaremos sobre las experiencias de Sullivan en sus viajes.

La pareja protagonista son Joel McCrea, como el director John L. Sullivan y Veronica Lake como la chica que le acompaña en sus viajes. He leído que la película está inspirada lejanamente en Los viajes de Gulliver, narración que cuenta 4 viajes, y en El Quijote, por la locura idealista del director y la escudera que le sigue en su aventura.

Imagen de 'Los viajes de Sullivan (1941)' Imagen de 'Los viajes de Sullivan (1941)'

"En memoria de quienes nos hicieron reír: saltimbanquis, payasos y bufones de todas las épocas y naciones, cuyos esfuerzos aliviaron nuestra cruz, con cariño les dedico esta película".

Camino a la perdición (2002)

Fecha: Jueves 10 Febrero 2011, 21:30h.
CEZ: 11.

Lugar: Cafetería del Hotel San Fernando.

Camino a la perdición (2002)

aliasCEZ:Juan (Sebastián)

Invitación a ver la película de Juan (Sebastián):

“Camino a la perdición” es una película dirigida por Sam Mendes, director de entre otras de “American Beauty”. Es una historia que la cuenta en primera persona el hijo del protagonista Michael Sullivan (Tom Hanks), un asesino a sueldo que se debate entre la lealtad absoluta a su jefe, el Sr. Rooney (Paul Newman), y a su propia familia y que transcurre durante los oscuros años de la Gran Depresión. Son tiempos duros en Rock Island, donde la mafia irlandesa impone su ley. La Ley Seca sigue estando vigente y los gángsters como Al Capone están en la cima del poder. El silencio que hay entre un padre y un hijo, el primero, uno de esos que llevan el sentimiento por dentro, que se nos advierte como alguien parco en palabras pero no corto en gestos de agradecimiento, y el segundo con la desazón que podría producir el llegar a creer que su padre nunca le dio un trato equitativo junto a su otro hermano. Y ese es el silencio que desentraña una relación dolorosa, emotiva y franca hasta el último segundo, una relación que, de vez en cuando, se va abriendo paso en base a cortos diálogos o cuestiones que surgen de la cabeza de los protagonistas y nos empapan con sus dudas, pensamientos e intenciones, haciendo que al final, uno llegue a comprender que había tras todos esos silencios, esos tiempos muertos de viaje hacía un nuevo destino, de escape, pero de reencuentro con el ser querido, con el único que en ese preciso instante podría insuflarte un poco de vida y desvelarte con un sincero gesto.

Sam Mendes construye así un relato de auténticas emociones donde la venganza sólo está en un primer plano, y se muestra como un mero trámite para alentarnos con esa emotiva relación padre-hijo.

La ambientación y todos los exquisitos aspectos técnicos sólo contribuyen a que creamos que podemos volver a esa era donde los trajes de punta en blanco, los sucios disparos en el más recóndito rincón de la pequeña Italia y los más inesperados sucesos se podían cerner sobre nosotros, sólo que retratado aquí con un sosiego muy distinto, pero con una sobriedad y un estilo patentes que impregnan cada edificio, cada gota de lluvia y cada minuto de modo impecable. La destreza del director norteamericano contribuye a hacer de "Camino a la perdición" una sublime delicia para todo aquel que se quiera dejar llevar de nuevo por cine negro soberbiamente culminado, alcanzando su cúspide en un par de secuencias durante su tramo final y dejando al espectador en un halo de magnificencia y sorpresa por ver tales momentos perpetrados con ese monumental pulso.

Apariciones en el reparto como la de Paul Newman y su increíble presencia, Dylan Baker o Daniel Craig son sólo una nota más para que la segunda cinta de Mendes se erija como un auténtico ejemplo de cine ejecutado con tacto, instinto y talento, mucho talento.

Observar las contadas pero secas y cortantes apariciones de un Jude Law en estado de gracia, la pertinente forma de Tom Hanks para palpar cada gesto y cada palabra, traduciéndolos en su personaje con mesura, pero gran intencionalidad y las abarrotadas calles de la gran ciudad en pleno hervor supone otro de los tantos alicientes para no perderse esta grandiosa joya del cine de gángsters. A la altura de pocas.